Dicen que los niños vienen al mundo
con un pan bajo el brazo, pero yo siempre había pensado que un hijo
era una tremenda inversión a fondo perdido, y que los niños
necesitaban tantas cosas que hacía falta muchísimo dinero para
poder tenerlos.
Si tú también piensas que tu peque te va a dejar en
la ruina, te invito a que le des un repaso a estos tips que he ido
recopilando, por si te sirven de ayuda para ahorrar unas perrillas,
en estos tiempos tan malos que corren.
1. Alimentación del recién nacido.
La
lactancia materna natural sale más barata que dar el biberón. Dar
el pecho es.... ¡Gratis!
¿Te has fijado en lo que cuestan los
botes de leche en polvo, y lo poco que duran? Pues ahora súmale
biberones, tetinas, termos, cajitas guardapolvos, y demás accesorios
para la limpieza y esterilización. A no ser que seas de ese mínimo
porcentaje de mujeres que realmente tienen un problema médico que
les imposibilita dar el pecho, tienes esta opción al alcance de tu
mano, o mejor dicho, de tus tetas.
2. Pañales.
Si usas pañalesdesechables, opta por las marcas blancas con mejor relación
calidad/precio. Hasta ahora, que yo conozca, son las de Lidl y Día.
Una opción aún más económica son los pañales de tela (¡fuera
miedos y prejuicios!), que si ya con el primer hijo en que se usan se
ve el ahorro, con el siguiente el gasto es prácticamente 0.
Mismo
caso para las toallitas, que también se llevan un pellizco, cuando
si estamos en casa, lo más saludable para la piel del culete es
simplemente agua. Además, te ahorras también lo que te cuestan las
cremas para el culete, anti irritaciones y dermatitis del pañal, y
demás pastas al agua.
Pero si tienes la posibilidad y te atreves, el
método más económico, de hecho completamente gratuito, es el
método sin pañal
.
3. Cuna.
Una cuna de diseño queda muy
mona si te la puedes permitir y estás de acuerdo con ese gasto, pero
hay cunas homologadas y muchísimo más baratas, que dan el apaño de
maravilla, como la de Ikea.
Y tras la opción barata, viene la
gratuita: el colecho. Poner a tu bebé en tu cama fortalecerá
vuestro vínculo afectivo, facilitará la lactancia materna,
propiciará el descanso de todos, y no te costará un duro.
4. Cochecito.
Cada vez que me acuerdo
de la pasta que me costó, me da algo, para luego descubrir que son
totalmente opcionales. Llevar a tu peque en brazos es gratis, pero si
quieres ahorrarte lo que te podría costar en el futuro la
fisioterapia para arreglarte las posibles tendinitis, hernia y/o lumbalgia,
los portabebés pueden ser la opción más sana y económica. Hay
muchísimos modelos, y de muchos precios, y lo ideal es tener varios,
pero te puedes apañar perfectamente con un fular elástico, que no
sale nada caro, y que es lo más aconsejado y práctico para los
recién nacidos.
Imagen de www.crianzanatural.com
Donde no podrás ahorrar, ni yo lo recomiendo, es en
la silla para el coche, ya que aquí estamos invirtiendo en
seguridad, y no hay más remedio que hacerlo. Las únicas opciones
son, o bien ir andando a todas partes, o bien hacer un bote en el que
vayan contribuyendo todos aquellos que pregunten qué te viene bien
que te regalen para tu bebé.
5. Chupetes.
También son opcionales,
pero pueden llegar a ser unos buenos aliados, aunque yo no
escatimaría en ellos. De usarlos, usaría unos buenos, pero lo más
barato es el consuelo de la tetilla de mamá.
6. Bañerita.
Aquí además de gastarte
una fortuna, te puedes encontrar un tiesto rodando por toda tu casa y
ocupando un espacio que, según el caso, puede llegar a ser muy
valioso. Cualquier cosa que no vaya en el baño significará
salpicaduras o charcos tremendos, y ajetreo de cubos de agua para
arriba y para abajo. Existen adaptadores para la bañera (simples
trozos de plástico) muy baratos y que total sólo se usan unos meses
hasta que el bebé se sienta por sí mismo en la bañera.
Una opción
algo más cara, aunque no necesariamente mucho más, son los
adaptadores sobre bañera, que tu espalda agradecerá.
Pero si en tu
casa únicamente hay ducha, existen también las bañeritas para
ducha, que por lo menos te ahorrarán el espacio y las salpicaduras
en el cuarto.
7. Nursery o habitación para el bebé.
Son una monada, con su cunita o moisés con dintel y todo, el
cambiador y la hamaquita. Pero te puedes encontrar que te has gastado
muchísimo dinero en algo en lo que el bebé apenas pasa el tiempo, y
que antes de que te des cuenta tienes que desmontar, vender o tirar
para sustituirlo por una habitación de niños más mayores. Por eso,
me la saltaría e iría directamente ahorrando para el futuro cuarto
de niño mayor, que puede tardar varios años en necesitar.
8. Ropita.
La ropa de talla 0-1 sale
cara y la mayoría de los niños sólo la usan un par de días,
muchos incluso no la llegan a estrenar porque les viene pequeña ya
desde que nacen. Para el resto de ropa, se puede ahorrar comprando (
y vendiendo) de segunda mano, en rebajas, heredando ropa, o
atreviéndote con el DIY (Do it yourself, o hágalo usted misma).
Y
en cuanto al calzado, ¿sabías que los bebés no necesitan
zapatitos? Resulta que tener a los niños descalzos tiene múltiples
beneficios para ellos, y en los meses de frío unos calcetinitos bien
calentitos bastan.
Imagen de http://veidimannaprotum.com/vpcrochet/patuco/
9. Alimentación del bebé más mayor.
Las papillas de cereales tampoco son necesarias. Hay muchas maneras
más económicas y saludables en que nuestros peques pueden tomar
cereales de forma natural. Los potitos, además de caros, tampoco son
demasiado saludables. Puedes hacer purés caseros, o sustituirlos (o
bien, combinarlos) por el Baby Lead Weaning.
10. Ahórrate los trastos caros e
inútiles, como el tacatá (que puede ser incluso perjudicial), el
parquecito en el que tu peque puede que incluso no tolere estar ni un
minuto, hamacas estrambóticas con luces y sonidos, y ese móvil
para la cuna (precioso, colorido y que canta nanas, pero que me aspen
si hay algún niño que se duerma con eso).
Parece que al final no salen tan caros
los niños. ¿Se te ocurre algún otro truco para ahorrarnos unos
eurillos? ¡Se aceptan sugerencias y aportaciones!